Durante su visita a la región, Aurora Williams resaltó los hitos locales en desalación, apoyo a la pequeña minería y el rol de Chile en el mercado global de minerales críticos, señalando además las posibilidades que traerán la Estrategia Nacional del Litio y la expansión minera binacional.
Nuevamente la ministra de Minería, Aurora Williams, visitó la región de Coquimbo, reafirmando la importancia de su área para el desarrollo local.
“Esta´región está definida como una región minera, con una actividad importante en la gran minería como en la pequeña”, asegura y repasa de inmediato los principales hitos mineros desarrollados durante este último tiempo. “Hemos consolidado temas relevantes como el inicio de operaciones de la primera desaladora minera ubicada más al sur de Chile, Los Pelambres, que además de abastecer a la minería, entrega 140 litros por segundo al Ministerio de Obras Públicas, permitiendo resolver otras necesidades. También hemos establecido modificaciones procedimentales que benefician tanto a la gran minería como a los pequeños productores. Hoy los pequeños mineros pueden obtener permisos en muy poco tiempo y sin costo, gracias a la declaración minera. Además, realizamos cambios a la Ley de Patentes Mineras, permitiendo que quienes tengan pertenencias de menos de 500 hectáreas accedan a patentes rebajadas”.
Respecto a la Estrategia Nacional del Litio, ¿cuáles son los objetivos para este año? y ¿Se abrirán oportunidades para los proveedores de la región?
La Estrategia Nacional del Litio integra distintas visiones: un equilibrio medioambiental —más del 30% de la superficie de los salares está siendo evaluada para su protección—, conocimiento científico a través de la creación del nuevo Instituto Público de Litio en Antofagasta, y la participación del Estado en la exploración y explotación. Hoy ya concluimos dos consultas indígenas en Maricunga y Alto Andino, y actualmente estamos realizando siete más en otros salares donde existen intereses privados. Esta estrategia busca que Chile pueda duplicar su producción de litio, lo cual es muy relevante considerando la demanda global. Este desarrollo abre un amplio espacio para proveedores: servicios logísticos, de transporte, exploración, habilitación de personal, entre otros. Además, el Ministerio de Minería ha conformado una Mesa Nacional de Proveedores —que sesionó recientemente en Calama— para articular y fortalecer sus competencias, asegurando que el sector cuente con la mayor competitividad.
Respecto al proyecto binacional Filo del Sol en el distrito Vicuña, ¿cómo ve su impacto estratégico? ¿Chile dejaría de ser el referente único en exportación de cobre?
Este distrito tiene yacimientos tanto en Argentina como en Chile. Lundin Mining, además, es dueño de Caserones y Candelaria, lo que podemos ver que tenemos un espacio productivo relevante. Que otros países desarrollen su industria minera no lo vemos como una amenaza, sino como una oportunidad. Tenemos experiencia, proveedores calificados e infraestructura, lo que nos permite complementar esa producción. La demanda por cobre seguirá creciendo, no hay un reemplazo, y creemos que este tipo de desarrollos puede incluso potenciar los yacimientos del lado chileno, como Caserones y Candelaria. Además, se abre la posibilidad de generar sinergias entre proveedores chilenos y argentinos, desarrollando asociaciones de colaboración y transferencia de experiencia.
