La empresa realizó no solo diversas obras para asegurar el suministro como conducciones y pozos, sino también acuerdos con las juntas de vigilancias para el uso del recurso de los tranques. “Aunque estas lluvias alivian, en parte, la extrema sequía (…) Seguimos con déficit con relación a un año normal”, señaló el gerente Regional, Andrés Nazer.
Más de $80 mil millones -equivalente a unos US$85 millones- ha destinado la sanitaria Aguas del Valle debido al duro déficit hídrico que enfrenta la región de Coquimbo. El balance, lo entregó el gerente Regional de la empresa, Andrés Nazer, después de los dos sistemas frontales que afectaron a la zona durante las últimas semanas.
Según Nazer, en una década, Aguas del Valle realizó no solo diversas obras para asegurar el suministro como conducciones y pozos, sino también acuerdos con las juntas de vigilancias para el uso del recurso de los tranques.
“Aguas del Valle ha realizado grandes esfuerzos, asegurando la continuidad de agua potable mediante inversiones superiores a los $80.000 millones desde 2015 (…) Esto sumado al trabajo con autoridades y acuerdos con las distintas juntas de vigilancia de la zona, ha garantizado el suministro en tiempos tan difíciles y evitado el racionamiento en miles de hogares”, mencionó el ejecutivo.
De acuerdo a la Dirección General de Aguas (DGA), las últimas precipitaciones dejaron un total de 8,1 millones de m3 en los embalses de la región. Esto es solo el 0,6% de la capacidad total de almacenamiento de los tranques distribuidos en las provincias de Elqui, Limarí y Choapa. En ese sentido, el mayor déficit se encuentra en los embalses La Paloma, Recoleta y Puclaro (ver tabla).
“Fueron dos sistemas frontales que se concentraron principalmente en las zonas costeras de la región, por lo que el efecto solo se visualizó levemente en el embalse La Paloma, el que aumentó cerca de 2 Hm3 su volumen. Aunque estas lluvias alivian, en parte, la extrema sequía que enfrenta la región de Coquimbo hace más de 15 años, seguimos con déficit de lluvia y nieve caída con relación a un año normal”, señaló Nazer.
El embalse La Paloma, según el último reporte hídrico entregado por la sanitaria, cuenta con un 7% de su capacidad. Antes de los sistemas frontales se encontraba con un 2% de su capacidad total. Puclaro, en la provincia del Elqui, subió a un 17% después de los últimos sistemas frontales.
En relación a las precipitaciones, La Serena cuenta con un déficit del 18% a un año normal, mientras que Ovalle e Illapel se acercan a un 30% de déficit. En Vega Negra, existe un -83% de nieve acumulada.
