Sacyr Aguas Chile y el Consorcio PDAM Mamanchay entregaron ofertas para desarrollar la iniciativa que contempla una inversión de US$318 millones y que busca levantarse en el sector El Panul de Coquimbo. El proyecto es considerado clave por el grave déficit hídrico de la zona y considera un periodo de explotación de 21 años.
Luego de algunas postergaciones, finalmente el Ministerio de Obras Públicas recibió las ofertas para la construcción y operación del proyecto para habilitar una desaladora en el sector El Panul de Coquimbo. La iniciativa, de unos US$318 millones, provocó el interés de 51 empresas y consorcios durante el proceso, sin embargo, solo dos actores presentaron propuestas económicas: Sacyr Aguas Chile y el Consorcio PDAM Mamanchay.
Sacyr Aguas es un grupo español global de concesiones, infraestructuras y servicios, que desarrolla sistemas de explotación y mantenimiento de todo tipo de plantas (potabilizadoras, depuradoras, desaladoras, tratamientos terciarios y reutilización, tratamientos industriales y otros). En tanto, y el Consorcio PDAM Mamanchay está integrado por las hispanasCox Water y Cointer.
De esta forma, con ambas firmas en competencia, la Apertura de Ofertas Económicas se realizará el próximo 14 de noviembre, lo que permitiría proyectar la adjudicación del proyecto durante el primer trimestre de 2026.
El proyecto “Concesión Planta Desaladora para la Región de Coquimbo” involucra un plazo de 21 años de explotación desde la Puesta en Servicio Provisoria, y responde a un compromiso del presidente de la República, Gabriel Boric, quien en enero de 2024 anunció el desarrollo de esta iniciativa en alianza público-privada para dar respuesta a la crisis hídrica que afecta hace años a la región de Coquimbo.
Por ello, la ministra de Obras Públicas, Jessica López, destacó que “este es un proyecto muy anhelado y es un compromiso de nuestro gobierno con los habitantes de la región de Coquimbo. Estamos dando un gran paso para seguir impulsando la primera desaladora que se ejecuta a través del sistema de concesiones, que va a contribuir a la reactivación económica de la zona y la seguridad hídrica”.
En tanto, el director general (s) de Concesiones, Claudio Soto, valoró el trabajo realizado para llamar a licitación en tiempo récord la nueva obra: “en poco más de un año desarrollamos las bases a licitación de esta obra que permitirá asegurar el abastecimiento de agua para más de 400 mil personas. Estamos muy satisfechos por el interés presentado por dos oferentes que harán factible materializar un proyecto estratégico para la región”.
El proyecto considera el diseño, construcción y operación de una planta desaladora de agua de mar de capacidad total 1.200 l/s, y operación inicial de 800 l/s, destinada a consumo humano y fines multipropósito. La iniciativa incluye las obras marítimas, la planta desaladora por tecnología de osmosis inversa y la conducción de distribución de longitud 18,7 kilómetros, hasta los estanques de volumen total 8.000 m3.
Durante la etapa de construcción, que se podrá iniciar luego de la obtención del Estudio de Evaluación Ambiental (EIA) tramitada por la Dirección General de Concesiones, se estima que el proyecto genere en torno a 1.000 empleos promedio al mes.
