Cada vez que un prestador de servicios acude a cobrar o va por pagos a la Corporación Municipal Gabriel González Videla, obtiene distintas excusas para el no pago: que la alcaldesa…; que los abogados…; que la Contraloría…. Y, lo último, es que en este mes de octubre “nadie se murió”. Insólito. Es decir que los pagos dependen de que si hay o no personas fallecidas, lo cual genera “ingresos frescos” en el Cementerio Municipal que administra la Corporación.
¿Se acuerda de la telenovela Sucupira… ?